Querida Milagros:
Ya han transcurrido 2 años de aquel trágico accidente ocurrido un 3 de Julio.
Hoy volvemos al ayer, y recordamos con dolor la pérdida de nuestros seres queridos, un dolor que no cesa y que nadie puede curar.
Aquel día marcó nuestras vidas para siempre.
He vivido en primera persona el infierno de aquel terrible día, y hoy he decidido hablar. Quiero compartir mi dolor y apoyar a todos los familiares de las víctimas, para que seamos una familia más. Hablar y expresar lo que uno siente no es un delito, porque aquí sólo somos perdonas humildes que buscamos el calor humanitario.
Recuerdo cuando mis familiares me dijeron que mi suegra no había llegado de trabajar, que había habido un accidente de metro y posiblemente ella había cogido ese tren. Nunca pensamos que sería tan grave, pues ninguno habíamos puesto las noticias, hasta que llegué a casa ,encendí el televisor y vi la gravedad del asunto. En las noticias se decía que era un atentado; todas las cadenas anunciaban este trágico accidente. Mi mente no podía aceptar que a nuestra familia había llegad la desgracia; nunca piensas que te puede tocar a ti.
Las horas pasaban muy deprisa y mi suegra no aparecía. Llamamos a todos los hospitales con la esperanza de poderla encontrar. La noche llegaba y el dolor cada vez se acercaba más.
Nos reunieron en una sala a todos los familiares. Nos hicieron esperar hasta la 1 de la madrugada. Sacaban las listas anunciando a las personas fallecidas. Cada vez que no anunciaban el nombre de mi suegra, la esperanza renacía. Hasta que llegó un señor, y enseñó las pertenencias de ella.
En ese momento, nos derrumbamos. Era como si nos hubieran arrancado la vida. No podía ser. Mi suegra estaba sana, no podía morirse, aún le quedaban muchos años por vivir.
Lo peor no acabó allí. Nos llevaron al Parc Central, allí traerían los féretros. Allí, como si fuera un mercado, a pleno cristal, para que los periodistas pudieran hacer bien la foto, y para que las cámaras pudieran grabar bien. ¿Y nuestra intimidad? Había gente que le gustaba salir en la tele ¿Es el morbo o es el sufrimiento de los familiares lo que se está grabando? , y a la gente ¿le gusta vernos llorar?.
Aún no entiendo que pudo ocurrir para que dejáramos de ser noticia, y por qué el día del entierro, nos ofrecieron un cheque con el valor de 5.000 € . ¿Por qué tanta prisa por callarnos la boca ¿No ha sido un atentado como se decía? ¿Es que la vida de una madre tiene precio?
Sigo sin entender como personas tan disciplinadas, pueden tener tan poca dignidad, cómo la gente puede pensar que a nosotros nos importa el dinero. Luchamos por hacer justicia, por defender el sufrimiento de nuestros seres queridos, porque aquel error no vuelva ocurrir. Porque la persona responsable admita su culpa, porque los familiares de las víctimas podamos vivir sin sentirnos manipulados.
Queremos saber que ocurrió aquel trágico 3 de Julio.
Ya nadie recuerda ese trágico día. Tenemos que manifestarnos para demostrarle a la gente que de verdad hubo un accidente, que murieron 43 personas y hubo 47 heridos, que fue un accidente real, que no nos lo estamos inventando, que realmente seguimos sufriendo. Parece como si nada hubiera sucedido, y ha sido el accidente más trágico de España, y no hay culpables. Nos dicen: seguir llorando, quizás así puedan sentirse mejor, olviden lo ocurrido; ya no hay nada que hacer.
Mi querida Milagros, desde aquí te dedico mis palabras, ya que es lo único que puedo hacer por ti.
Ahora a la gente le molesta que lleve tu foto en mi camiseta, les molesta que anunciemos tu nombre, les molesta que te recordemos.
Pero tú sabes, que siempre estarás en nuestros corazones, porque una madre como tú no se puede olvidar. Eras buena luchadora, una encantadora mujer, nosotras, tus hijas, te recordaremos constantemente, eras la alegría de nuestra casa. Eras una persona especial.
Rubén se quedó esperándote aquel día. Ya tiene 3 años, y aún se acuerda de ti. Todas las noches te reza y te envía un beso, y cuando ve flores, dice que son para iaia. Cuando mira tu foto te abraza con una sonrisa, siempre le hablamos de ti para que sepa que tuvo una abuela ejemplar, para que sepa lo mucho que lo quiso su iaia.
Desde aquí te mandamos un beso, pués permíteme llamarte “mamá” , porque para mí has sido una gran madre, y nunca olvidaré el amor que sentías por mi hijo. Me has enseñado a querer a la familía, a la que quiero con locura, más que nada en la vida. Siempre has dicho que lo mejor que le puede pasar a una mujer, es vez a tus hijos ser felices, y yo cuando mira mi hijo tu foto, creo que te mira con una gran alegría. ¡Qué feliz sería yo, si estuvieras aún aquí¡ Sería muy feliz si te viera al lado de tus hijos, sería muy feliz si pudiera verte sonreir . Desde aquí todos nosotros lucharemos hasta el final para que la gente sepa lo que ocurrió y no descansaremos en paz hasta que el culpable pida perdón.
Marta Berdejo.
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